Humo azul, entran en el escenario los componentes de Dorian.

La sala se llena de música, cambian las luces, ahora son blancas, Mark comienza a desgranar las letras de una canción, suena suave pero convincente.

Alarga sus brazos con paz, con deseos de conectar con "su" público, jóvenes treintañeros en su mayoría, super entregados. Corean los estribillos.

Mark suelta la guitarra y dobla los brazos contra sus sienes, habla de dolor. Hay verdad en este concierto, la melena se agita sobre la cara de Belly en los teclados. Ella esta ahí. Ellos son jóvenes barceloneses, ellos triunfan, ellos hacen pop electrónico.

Y cuando un sólo del batería y el percusionista llena la sala, la música en toda su pureza te invade.

Dorian en directo te atrapan, son cálidos, creíbles.

La voz de Mark va desgranando historias de amor y desamor que mezcla con Dios o con temas sociales sin dramatismo, con naturalidad:

"en el fondo todo lo que quiero es verte amanecer"